La reciente firma del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre el Perú y Hong Kong, en el marco de APEC 2024, marca un hito en la estrategia peruana para fortalecer su presencia en Asia. Hong Kong, como tercer destino de las exportaciones peruanas hacia el continente asiático, se consolida como un socio estratégico con el potencial de ampliar los horizontes comerciales del país. Este acuerdo no solo refuerza los vínculos económicos, sino que también abre oportunidades para diversificar la oferta exportadora, atraer inversión extranjera y dinamizar sectores clave de la economía peruana.
“Además, contribuye a diversificar los destinos de exportación, reduciendo la dependencia de mercados tradicionales como Estados Unidos y Europa”.
Una de las implicancias más relevantes de este tratado es la eliminación de aranceles para productos agrícolas y pesqueros, áreas en las que el Perú tiene una notable ventaja comparativa. El mercado hongkonés, conocido por su alta demanda de alimentos de calidad, brinda una oportunidad invaluable para productos como la uva, el espárrago, el café y la quinua, así como para la pota y los langostinos. Estos productos, emblemáticos de la riqueza agroexportadora peruana, tendrán una mayor competitividad en este destino, facilitando el acceso a consumidores exigentes y con alto poder adquisitivo.
Por otro lado, Hong Kong actúa como un puente hacia el vasto mercado de China continental y otros países asiáticos. Con un sistema económico abierto y sofisticado, este enclave ofrece una plataforma ideal para que las empresas peruanas logren una inserción más robusta en Asia. Esto, sin embargo, exige una mejora continua en los estándares de calidad, innovación y sostenibilidad de los productos peruanos, factores que resultarán decisivos para conquistar nichos específicos y mantener una presencia sostenida.
El TLC también supone desafíos importantes. Las empresas peruanas, especialmente las pequeñas y medianas, deben estar preparadas para competir en un entorno comercial altamente demandante. Esto incluye no solo adaptarse a los requerimientos técnicos y fitosanitarios, sino también entender las complejidades culturales y las preferencias de consumo en Asia. Por ello, es fundamental que el Gobierno peruano articule políticas que faciliten la capacitación empresarial, el acceso a tecnología y la mejora en infraestructura logística, elementos clave para potenciar la competitividad del país.
Finalmente, este acuerdo tiene implicancias más amplias en términos de diplomacia económica. Refuerza la imagen del Perú como un país abierto al comercio y con vocación de integrarse a las cadenas globales de valor. Además, contribuye a diversificar los destinos de exportación, reduciendo la dependencia de mercados tradicionales como Estados Unidos y Europa.
En conclusión, el TLC con Hong Kong representa una oportunidad histórica para el Perú. Si se gestionan adecuadamente los retos, este acuerdo puede consolidar al país como un actor relevante en el dinámico mercado asiático, impulsando el crecimiento económico y el desarrollo sostenible e inclusivo en el mediano y largo plazo.
Extraído de: https://elperuano.pe/noticia/258157-alianza-estrategica-para-el-comercio